El pasado domingo 15 de abril de 2012 Universitario perdió como visitante por 1 a 0 ante Alianza Lima en el estadio Nacional por la octava fecha del Campeonato Descentralizado. El gol lo hizo José Carlos Fernández de shot a los 31 minutos del primer tiempo. La “U” formó con Luis Llontop en el arco; Diego Chávez, Werner Schuller, John Galliquio y Álvaro Ampuero en la defensa; Rainer Torres, Antonio Gonzales, Horacio Calcaterra y Edinson Flores en el mediocampo; y Miguel Ximénez con Miguel Torres en la delantera. En el segundo tiempo ingresaron Carlos Olascuaga por Miguel Torres, Aurelio Saco Vértiz por Antonio Gonzales y Rodrigo Camino por Diego Chávez. El árbitro Víctor Hugo Rivera amonestó a los aliancistas Edgar Gonzales, José Carlos Fernández, Henry Quinteros, Giancarlo Carmona (ex crema) y Jesús Rabanal (ex crema) y a los merengues Antonio Gonzales y Horacio Calcaterra. Además, expulsó a Carlos Ascues del equipo local.
Como dato anecdótico tomado de la transmisión de CMD cabe señalar que, al final del primer tiempo, mientras los ilusos hinchas cremas esperábamos que en la segunda mitad se alcanzara por lo menos el empate, el técnico de nuestro equipo esperaba el segundo gol de Fernández. No hay otra razón para que, antes de irse al vestuario, se acercara a Quinteros, capitán cagón, y le dijera “Dile a Fernández que no se quite la camiseta”. El mencionado entrenador, que cuando se vaya nos dejará las peores estadísticas de la Historia Crema Reciente, tenía la certeza de que Fernández mojaría de nuevo, y esperaba que el festejo no fuera cachaciento, nada más.
Olvidemos por un tiempo la nefasta racha de 39 partidos sin ganar 2 consecutivos, que arrastramos desde el 20 de noviembre de 2010. Los números de este año son simplemente catastróficos. Hemos jugado 9 partidos en el año (8 oficiales y un amistoso) de los cuales sólo hemos ganado 1, hemos empatado 4 y hemos perdido también 4. En cualquier lugar del mundo estos resultados razonablemente determinarían la salida del técnico, con mayor razón cuando fecha a fecha demuestra incapacidad, nula comprensión del desarrollo del juego y escasas luces para efectuar replanteos tácticos sobre la marcha. Mensaje, entonces, para la señora Rocío Chávez, o para Right Business S.A., o para quien sea que esté administrando el club por orden de papá gobierno: una institución deportiva, para que sea rentable económicamente, necesita resultados deportivos positivos, y para eso se requiere un director técnico capacitado. Nada ganaremos si la administración económica del club se torna eficiente pero se mantiene la mediocridad de la conducción deportiva. Si hay que hacer un cambio, que sea integral.
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